viernes, 9 de septiembre de 2022

PICOS, REGAÑÁS Y OTROS PANES DE PICOTEO

 FUENTE: https://elcomidista.elpais.com/elcomidista/2016/06/23/receta/1466692507_603998.html


PICOS, REGAÑÁS Y OTROS PANES DE PICOTEO

Hecho en casa, fácil, adictivo y totalmente adaptable a tu gusto. Llega el aliado de tus tapeos veraniegos, y está que cruje.

El crujido es una de las características más adictivas del pan. No sé si es porque al morder una corteza o una pieza seca las ondas se transmiten por los huesos de la mandíbula por todo el cráneo y masajean los tejidos cerebrales dándonos gustirrinín, pero el caso es que el aprecio por los panes crujientes es prácticamente universal.

Además del placer del crujido, los panes secos garantizan una gran conservación, lo que ha resultado clave en muchos momentos y lugares a lo largo de la historia. Por ejemplo, los marineros de las grandes singladuras transoceánicas se alimentaban a base de panes crujientes que habían sido cocidos varias veces hasta dejarlos secos como una mojama: el bizcocho o galleta náutica (de ahí la palabra "bizcocho", que en castellano ahora se emplea para denominar a una masa tierna, pero que en italiano conserva su origen; los biscotti son piezas secas cocidas dos veces).De los taralli mediterráneos a los knäckebröd y tunnbröd escandinavos, de los picos, regañás y tortas galianas del sur a la galleta forta y las crostas baleares o las rosquilletas valencianas, nadie se puede resistir al crujido de las masas (y a lo cómodo que es tener un pan siempre a punto y que te dure semanas sin ver alteradas sus características).Hablando de crujido, siempre miro con envidia la riqueza léxica de otros idiomas en estos asuntos.

En castellano nos solemos limitar a “crujiente" (hay quien dice “crocante", incluso en materiales del ámbito del análisis sensorial he leído la palabra “crujencia”, en serio). En el ubicuo inglés, sin buscar demasiado, encontramos crunchy y crispy (que tienen su homólogo en el knusprig y knackig alemán), que designan dos tipos de crujido diferente, uno más intenso, otro más suave… centraos en las diferencias de crujir de una galleta o un barquillo y veréis por donde voy.

Los franceses, como en tantas otras cosas gastronómicas, siempre son admirables y manejan en su habla común hasta tres vocablos: croquantcraquant y croustillant, cada uno denota una distinta intensidad en el crujido, un delicado matiz. El hecho de poder distinguir suaves matices nos hace ser capaces de disfrutarlos más (como cuando empiezas a aprender que todos los pájaros marrones no son gorriones, o que todos los vinos no saben exactamente igual).Todo esto nos lleva de vuelta a una mesa veraniega con unas cañas y un plato de queso o jamón, a una tapa de ensaladilla rusa… y sus acompañantes: picos, colines, regañás.

El cotidiano y sencillo placer del tapeo llega a su máxima expresión gracias a algunas de las piezas más humildes pero emblemáticas de la panadería española. Es común que los picos se elaboren con una masa dura, refinada, que exige su manipulación a rodillo, por lo que su elaboración casera necesita de músculo y paciencia. Para esta masa polivalente propongo una masa poco hidratada, mucho más sencilla, que nos evita la necesidad de refinarla; de hecho, como un poco de masa cunde mucho, el tamaño de la masa hará que el amasado no sea terrible, y prácticamente sea una especie de refinado manual.

Festival de picos. IBÁN YARZA

Con la misma masa elaboraremos picos, colines y regañás (aunque es común que las haya también sin fermentar); 3 x 1, como en el súper. Usaremos un fermento para dar profundidad al sabor de los picos, y que tras el último mordisco quede en la boca un regusto delicioso. Un poco de aceite y el uso opcional de harina de trigo duro (vale la de fritura), harán el resto. En un horno casero se pueden conseguir grandes resultados, sólo hay que ser un poco cuidados en el momento de la cocción. Mi consejo es que hagas varias tandas de esta masa, ya que, como decía al principio, su crujido es sencillamente adictivo.

Ingredientes

Fermento

  • 50 g harina del súper de-toda-la-vida (si controlas de harinas: mitad panificable y mitad floja)
  • 25 g agua
  • 1 g levadura fresca (el tamaño de un garbanzo) o bien 0,3 g levadura seca (la superficie que ocupa cubrir una moneda de 2 €)

Masa final

  • Fermento
  • 200 g harina del súper de-toda-la-vida (si controlas de harinas: mitad panificable y mitad floja)
  • 50 g harina de trigo duro* (más fina que la sémola, vale harina de fritura; esa que al tocarla es como finísima arena)
  • 100 - 110 g agua
  • 25 g aceite oliva virgen
  • 3 g sal (1/2 c. p.)
  • 3 g levadura (equivalente al volumen de unos 3 garbanzos) o 1 g de la seca (1/3 c. p.)

Opcional: también puedes usar harina integral (ajustando la cantidad de agua, ya que absorberá un poco más) o semillas (30 g de sésamo irían de maravilla) y especias a tu gusto.

Preparación

Para preparar el fermento, mezclar los ingredientes y amasarlos someramente hasta que estén bien distribuidos. Fermentar una hora a temperatura ambiente dentro de un bote tapado y luego meter a la nevera (allí puede aguantar un par de días sin problemas). Si no te has acordado, puedes hacer el fermento el mismo día sin usar la nevera ni esperar; es todo igual pero se fermenta de 3 a 4 horas a temperatura ambiente antes de usarlo.

Para preparar la masa, mezclar todos los ingredientes, incluido el fermento, hasta obtener una masa bastante dura (no eches todo el agua de vez, añade solo unos 100 g y echa el resto si ves que te es imposible amasar).

Amasa unos 5 - 7 minutos hasta que la masa quede fina, lisa por completo, con una textura dúctil y extremadamente plástica. Fermentar tapado durante 2 horas.

Para formar, tenemos tres opciones.

Picos: estirar la masa a rodillo (vale una botella) hasta que quede muy fina (1 mm), y con un cuchillo grande o una rueda corta pastas hacer cuadrados de unos 3 x 3 cm. Enrollar los cuadrados haciéndolos rodar con la palma de la mano contra la mesa, para que se selle la masa. Atención a que no queden muy grandes, ya que se hincharán durante la fermentación y la cocción.

Disponerlos sobre una hoja de papel de hornear con espacio entre ellos para que crezcan.

Regañás: con la masa estirada para picos, a 1 mm de grosor, cortar cuadrados de unos 2 x 3 cm (o del tamaño que te gusten las regañás) y disponerlos sobre una hoja de papel de hornear con espacio entre ellos para que crezcan. Antes de hornear, pinchar con un tenedor; esto dará el típico aspecto agujereado (ver foto) y evitará que salgan bolsas de aire grandes.

Colines: estira la masa a rodillo hasta que tenga un grosor de unos 5-6 mm. Cortar cintas de 1 cm escaso de grosor y de ahí corta los colines a la longitud deseada, de 3-4 cm a donde quieras llegar. Disponerlos sobre una hoja de papel de hornear con espacio entre ellos para que crezcan.

Fermentar aproximadamente 1 hora. Es importante que la masa no se seque, puedes fermentarla dentro de un armario (el mejor armario de la casa es el horno) y si vives en un clima muy seco o usas aire acondicionado, pon un cuenco con agua tibia para crear un poco de humedad.

Para la cocción, calienta el horno a 180º (unos 15-20º menos si usas ventilador). El uso del ventilador es interesante en estas piezas, ya que te permite cocer dos o tres bandejas a la vez y obtener resultados homogéneos (los de la foto están cocidos con ventilador en dos bandejas).

Pon una bandeja metálica vacía en la base del horno. Cuando el horno esté caliente y vayas a meter la masa, echa un vaso de agua en la bandeja para crear vapor. Cuece los picos durante 5 minutos con ese vapor. Después, quita la bandeja con vapor y continua la cocción hasta llegar a los 13-14 minutos de tiempo total para regañás o 16-17 para picos y colines.

Cuando veas que las piezas tienen un dorado homogéneo y bonito, un truco muy interesante para asegurarte un crujido agradable es apagar el horno y dejarlo con la puerta entreabierta. De este modo, las piezas se van secando suavemente con el calor residual. Déjalas ahí al menos 10 minutos. Luego sácalas, deja que se enfríen y guárdalas en un bote hermético para que se mantengan crujientes.

*Si no encuentras harina de trigo duro, sencillamente omítela y usa en su lugar otros 50 g de la otra harina.

¿Has intentado hacer esta receta u otras de El Comidista, y no te han salido bien? Quéjate a la Defensora del Cocinero enviando un mail a defensoracomidista@gmail.com

 FUENTE: https://elcomidista.elpais.com/elcomidista/2016/06/23/receta/1466692507_603998.html

jueves, 8 de septiembre de 2022

Estas son las 21 paradas del Tranvía de la Bahía de Cádiz que unirá Cádiz, San Fernando y Chiclana

 

Estas son las 21 paradas del Tranvía de la Bahía de Cádiz que unirá Cádiz, San Fernando y Chiclana



  • El tranvía ya ha iniciado la última fase de pruebas 

  • Entrará en funcionamiento en el mes de julio

  • El estreno del esperado tranvía metropolitano se acerca. La previsión es que para el mes de julio empiece a funcionar. Hay una gran expectación con este transporte público que se suma a la oferta de movilidad en la Bahía de Cádiz. Sobre todo, porque va a conseguir conectar mejor Chiclana con San Fernando y Cádiz, ampliando así las opciones para ir y venir del municipio chiclanero.

    Este tranvía tendrá, en total, 24 kilómetros de trayecto21 paradas en todo el recorrido y contará inicialmente con 7 unidades, que se ampliarán a 10 en 2023. Una de las peculiaridades que tendrá este tranvía es que usará las mismas vías de Renfe en la parte de trayecto que circule por Cádiz y en el nudo de La Ardila-Río Arillo. Este hecho causa que los horarios tengan que estar coordinados con la línea C1 de Cercanías.

  • Las 21 paradas del nuevo tranvía de la Bahía de Cádiz

    Estas son las 21 paradas que conformarán la línea 1 del tranvía metropolitano:

    • Estación central de Cádiz (correspondencia con C1 de Cercanías, Alvia y Media Distancia).


    • San Severiano (correspondencia con C1 de Cercanías).
    • Segunda Aguada (correspondencia con C1 de Cercanías).
    • Estadio (correspondencia con C1 de Cercanías).
    • Cortadura (correspondencia con C1 de Cercanías).
    • Río Arillo (correspondencia con C1 de Cercanías).
    • Ardila.
    • Santo Entierro.
    • Plaza del Carmen. 
    • Compañía de María.
    • Plaza del Rey. 
    • Plaza de la Iglesia.
    • Venta de Vargas.
    • Tres Caminos.
    • Pinar de los Franceses.
    • Marquesado.
    • Alameda Solano.
    • Nuestra Señora de Los Remedios.
    • Reyes Católicos.
    • La Hoya.
    • Pelagatos. 

    Última fase de pruebas del tranvía

    En la mañana del 10 de junio 2022 se ha conocido que este transporte público está próximo a estrenarse. De hecho, ya se ha entrado en la última fase de pruebas, consistente en hacer simulaciones de viajes convencionales entre Cádiz y Chiclana

    Este medio de transporte dará servicio a 233.500 personas en la provincia de Cádiz y en cada viaje podrán entrar 200 personas, 50 de ellas sentadas. La frecuencia, según los datos de la Junta de Andalucía en su web, será de 15 minutos. La administración autonómica calcula que 4,23 millones de personas al año usen este tranvía.

  • El tranvía de la Bahía de Cádiz recibió ayer el espaldarazo que precisaba de cara a su entrada en servicio el próximo mes de septiembre, que es la nueva fecha anunciada esta misma por el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, para la entrada en funcionamiento de este nuevo medio de transportes.

    Este espaldarazo vino dado por el anuncio realizado ayer por el Gobierno central de que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), la Junta de Andalucía y Adif han suscrito ya el convenio para la conexión del tren de la Bahía de Cádiz con la Red Ferroviaria de Interés General (RFIG).En concreto, este acuerdo lo que permite es que las unidades ferroviarias puedan circular por la vía del tren entre la estación del Río Arillo y la estación de Cádiz, en la Plaza de Sevilla, en ambos sentidos.

  • Este convenio ahora firmado tiene una importancia fundamental, aunque llega con 16 años de retraso. Hay que recordar que en agosto de 2006 la entonces Consejería de Obras Públicas de la Junta de Andalucía adjudicaba la primera obra del proyecto global del tranvía, Se trataba del paso elevado denominado Salto del Cabrero y ubicado en la zona de La Ardila, en la salida de San Fernando en dirección a Cádiz. Desde entonces hasta ahora se ha venido desarrollando un proyecto sin que en un documento se autorizara al tranvía circular por la vía del tren.

    En el comunicado remitido ayer por el Mitma se informa que la Junta de Andalucía está llevando a cabo las últimas actuaciones necesarias para la puesta en servicio del tren de la Bahía de Cádiz que, como se sabe, discurrirá por una plataforma de nueva construcción, entre Chiclana y la Estación de Río Arillo, en San Fernando, y por las vías de la Línea Alcázar de San Juan-Cádiz, perteneciente a la RFIG, desde San Fernando hasta Cádiz.

    En la cabecera de la Estación de Río Arillo, en el lado de Cádiz, se dispondrá la denominada Bifurcación Río Arillo que conectará físicamente las vías de ambas redes. Además, la estación dará servicio tanto a los trenes que circulen por la RFIG como a los de la red autonómica, permitiendo el transbordo de viajeros entre una y otra red.



  • Objeto del convenio

    Por tanto, este convenio tiene como objeto fomentar la interoperabilidad entre las redes estatal y andaluza, “en beneficio del interés público y la eficacia global del sistema ferroviario”, apostilla el Mitma en su nota.

    El convenio establece que la normativa vigente en la RFIG sobre el personal ferroviario, el material rodante, la circulación ferroviaria o los certificados de seguridad de las empresas ferroviarias será plenamente aplicable en el tramo de conexión, sin especialidades propias o excepciones. Además, los trenes que circulen por la línea Alcázar de San Juan-Cádiz de la RFIG podrán efectuar parada comercial en la estación de Río Arillo, de titularidad autonómica.

    Asimismo, los administradores de infraestructuras de ambas redes, ADIF y la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía, han suscrito un acuerdo técnico para establecer, de forma coordinada, los acuerdos necesarios sobre este tramo de conexión, donde se definen los límites físicos del mismo y se fijan las condiciones operativas y de contingencias particulares bajo las que se regirán las circulaciones.A los efectos de velar por el cumplimiento de las obligaciones contraídas por las partes intervinientes, se constituirá una comisión de seguimiento que estará formada por dos representantes de cada una de las partes que integran el convenio.


  • Sólo quedan tres pasos para la puesta en servicio

    Para que el tranvía de la Bahía entre en servicio, algo que se espera que se produzca este septiembre, sólo restan tres pasos. El primero es que la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria otorgue la APS (Autorización de Puesta en Servicio) para que las unidades puedan circular por la vía del tren. Este es un trámite que estaba condicionado a la firma del convenio general anunciado ayer. Aparte, falta que el Consejo de Gobierno de la Junta autorice el gasto para la firma del contrato de este servicio público de transporte con Renfe Viajeros y luego firmarlo entre las partes. Y el último paso sería que la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía tramite el expediente de autorización de puesta en servicio, que implica la aprobación del sistema tarifario, el reglamento de viajeros, el Plan de Autoprotección, etc.


jueves, 1 de septiembre de 2022

Pan casero con harina común, la receta más fácil y rápida (sin levado) que siempre sale bien

Pan casero con harina común, la receta más fácil y rápida (sin levado) que siempre sale bien Hacer pan en casa es algo maravilloso, aunque meterse en ello suele imponer un poco. Asusta leer una receta y encontrarse con términos como masa madre, larga fermentación, etc, pero ese no es nuestro caso. La receta de pan casero con harina común que hoy traemos es todo lo contrario. Perfecta para estrenarse en el mundo del pan y con total garantía de éxito.
Este pan siempre sale bien y no necesita levado. En poco más de una hora esta hogaza que veis en portada estará lista para ser devorada. En su elaboración usamos harina común, la del super de toda la vida, algo que resulta comodísimo. Una última cosa, la levadura fresca se puede sustituir por cinco gramos levadura seca de panadería. Una vez listo, podemos consumirlo en el día o rebanarlo para congelar e ir teniendo nuestro pan listo a medida que lo vayamos necesitando, que podemos combinar con opciones como el pan de molde casero, una baguette o para unas clásicas tostadas. ¡
Ingredientes (Para 1 unidades) Harina de trigo común, de todo uso 500 g Agua templada 325 ml Levadura fresca de panadería 15 g Sal 10 g Azúcar 10 g Aceite de oliva virgen extra 45 ml Cómo hacer pan fácil y rápido con harina común Dificultad: Fácil Tiempo total 55 m Elaboración 10 m Cocción 45 m Reposo 20 m Introducimos el agua templada en un recipiente amplio y hondo y añadimos la levadura fresca, desmenuzada, y el azúcar. Removemos hasta que el azúcar y la levadura se integren por completo. Añadimos la mitad de la harina y todo el aceite. Removemos bien, procurando aplastar los grumos que se formen, y dejamos reposar durante 20 minutos a temperatura ambiente, cubriendo el recipiente con un trapo limpio. La masa crecerá ligeramente y se llenará de burbujas. Transcurrido el tiempo de reposo incorporamos el resto de la harina, la sal y removemos hasta que no podamos más, porque se volverá muy espesa. Espolvoreamos la superficie de trabajo con harina y volcamos la masa sobre ella. Nos engrasamos las manos con aceite y amasamos durante un par de minutos.
Formamos una bola con la masa y la colocamos sobre una bandeja de horno cubierta con papel vegetal untado con un poco de aceite. Hacemos dos cortes en la superficie con un cuchillo afilado y, si queremos dar un aire rústico al pan, lo espolvoreamos con harina. Embadurnamos con aceite el interior de un recipiente amplio y hondo apto para horno (hemos usado un bol de pyrex de 24 cm, pero se puede usar una cacerola o similar) y cubrimos con él la masa. Cocemos en el horno, precalentado a 200 ºC con calor arriba y abajo, durante 45 minutos. Destapamos y dejamos enfriar sobre una rejilla antes de consumir.

martes, 21 de enero de 2020

SOPA DE PAN Y VARIACIONES

La sopa (la de pan, se entiende): la sopa primaria y básica; la sopa absoluta, la madre de todas las sopas, la madre de la palabra sopar. Hoy en día la RAE define la sopa en su primera acepción como un "plato compuesto de un caldo y uno o más ingredientes sólidos cocidos en él. Sopa de fideos, de verduras, de pescado". O sea, lo que tomamos con cuchara y viene en plato hondo o tazón. No obstante, si uno retrocede en el tiempo los suficientes siglos, sucede la magia.
La sopa era antes que nada el pan remojado, las sopas de pan, el ingrediente que define el producto final. Así, el tiempo y las palabras nos regalan la deliciosa primera acepción de sopa en 1739: "Pedazo de pan empapado en qualquier liquór. Covarrubias se inclina à que viene del Latino "Offa", mudada la ff en p (como se suele hacer) y assi se dijo "Opa", que algunos deducen esta voz a "sopore", que significa el rocío, que cae del celebro en los sentidos, y empapandose en ellos los adormece [sic]". Delicioso, como un plato de sopa.
La sopas de pan tienen innumerables nombres y variaciones a lo largo y ancho del país; la sopa castellana, la archiconocida sopa de ajo hecha con pan candeal, la zurrukutuna (sopa de pan con bacalao), la sopa torrada con albóndigas y negrillas (hecha con pan tostado), etc. Estas elaboraciones sencillas han nutrido y dado consuelo y felicidad a incontables generaciones que nos precedieron.

A veces se presentan como algo contundente, otras veces como algo de una sencillez casi ascética (pan, agua caliente y tomillo)... sonrío cuando alguien de aquí se fascina con la sencillez y "el ascetismo zen" de la comida japonesa, y pienso si esta gente no habrá visto nunca el mobiliario de una casa castellana de hace un tiempo, un paisaje de olivar jienense o no habrá tomado una sopa de pan y tomillo; toma ascetismo zen.

Hoy somos lo bastante ricos (y olvidadizos de nuestra procedencia) como para que en muchas ocasiones este alimento haya caído hasta cierto punto en desuso. Siguiendo la idea de Biscayenne en su propuesta-ONG Adopta un postre, sugiero aquí –ahora que por fin llega el fresquete– un par de ideas para darle con ganas a las sopas; pero, lo que es más importante, propongo que entre todos hagamos una recopilación de las sopas de nuestro pueblo o zona: todas las respuestas, recuerdos, anécdotas e historietas son bienvenidas en los comentarios.
¿Cómo es la sopa de pan de tu zona? ¿Se hace con migas tostadas o con rebanadas secas? ¿Es de trigo, de centeno o de maíz (como los talos remojados en leche)? ¿Qué recuerdos tienes –o tenía tu abuela– respecto a esas sopas? ¿Haces mucho ruido al sorber? Recuerda lo que decía Melibea... jamás me acosté sin comer una tostada en vino y dos docenas de sorbos, por amor de la madre, tras cada sopa.
Sopa de ajo con pan de centeno negro alemán
Cualquier vallisoletano torcerá el morro ante la idea de que la sopa de ajo no se haga con pan lechuguino, candeal, sobado, de miga blanca y prieta... y puede que incluso a alguien le dé un pequeño sofoco ante la idea de usar pan de centeno. Pero un buen pan de centeno 100 % –o con mucho centeno– en realidad tiene una gran cantidad de sabor, y al cocerlo lentamente otorga al caldo unos matices profundos. Se queda uno henchido de un gozo y satisfacción, como a medio camino entre en Cid Campeador y Thor.
Ingredientes


Para 4 personas
  • 150 – 200 g pan de centeno estilo alemán bien reposado (bueno, o el que encuentres, con un toque ácido y una miga gelatinosa y jugosa). A mí me gusta cortarlo no demasiado fino; cada uno a su gusto. Y me encanta que tenga mucha corteza (al fin y al cabo la corteza es la parte del pan que tiene un sabor más marcado). Punto especial si tuestas el pan antes de usarlo.
  • 4 - 5 dientes de ajo en láminas (confieso que suelo echar más, pero para gustos, como casi cualquier receta tradicional).
  • 3 cucharadas de pimentón. En esto tengo amor para dar y regalar; me encanta el toque ahumado del pimentón de la Vera y el dulzor del pimentón murciano, y cuando pillo algo de pimentón zamorano o Tap de Cortí de Mallorca también soy feliz.
  • 75 - 100 ml aceite de oliva del bueno (aplicar aquí la misma política que en el pimentón).
  • 1 - 1,5 L de agua de agua o caldo.
  • Opcional: echar un huevo por persona para que se hagan con el calor residual, en el rato entre que sacas la cazuela del fuego y la gente se sienta a la mesa.
  • Opcional en clima muy frío: pañuelos, para cuando a la gente se le caiga el moquillo de puro gustirrinín.
Preparación
  1. Freír los ajos en el aceite (me gusta empezar a fuego muy suave, para que el aceite coja mucho sabor). Retirar los ajos, freír el pan en el aceite, echar el pimentón y freír someramente, sin que se queme.
  2. Incorporar los ajos y echar el agua (o caldo). A mí me gusta que cueza un buen rato (unos 20 - 25 minutos), para que el pan casi se desintegre y cambie de textura. Esta es la magia, en mi opinión de la sopa de pan; hacer algo magno con ingredientes tan humildes, y que el resultado no se parezca en nada a sus componentes iniciales.
  3. Si te animas a echarle huevos (a la sopa), este es el momento; una vez hervidas las sopas de pan, aparta la cazuela del fuego y casca un huevo por persona, depositando el contenido con delicadeza en el interior del líquido caliente. En 3 ó 4 minutos, estarán al punto. Déjalos más o menos tiempo según te gusten más o menos cocidos.
Sopa de ajo con kimchi y sobrasada (en la foto)
Es común hacer la sopa de ajo con poco más que agua, ajo, pan reposado, aceite y pimentón. Hay gente que le pone caldo, y a mí me gusta ponerle productos fermentados, como kimchi, chucrut o pepinillos, que son 'acumulaciones' de sabor y dan un fondo increíble a la sopa. Si a esto le añades un poco de sobrasada o chorizo como grasa de fritura del pan, es la locura. ¿Qué tienes por casa que le de un toque profundo y delicioso a la sopa... ¿Berenjenas de Almagro, chipotle ahumado? Ojo, que lo mismo vale un buen pisto o una salsa de tomate casera.
Ingredientes
Para 4 personas
  • 150 – 200 g de tu pan favorito (o el que tengas medio mustio en casa).
  • 4 - 5 dientes de ajo en láminas.
  • 50 g de sobrasada (o chorizo, chistorra, etc.)
  • 50 g de kimchi (yo suelo usar de col, pero con el de daikon estará riquísimo, o lo mismo con chucrut).
  • 50 - 75 g aceite de oliva del bueno.
  • 1 - 1,5 L de agua.
Preparación
  1. Mismo método que la primera: freír los ajos lentamente en el aceite. Retirar los ajos.
  2. Freír el pan en el aceite, retirar el pan.
  3. Echar una gotita más de aceite y freír lentamente la sobrasada bien picada, para que sude algo de su gloriosa grasa naranja.
  4. Añadir el kimchi picado muy fino y rehogarlo un par de minutos en la sobrasada.
  5. Finalmente, añadir los ajos, el pan y el agua, cocer unos 15- 20 minutos y servir bien caliente.
  6. Panadería Dalia en Chiclana de la Frontera Cádiz 
  7. telf: 856 116 713

domingo, 23 de octubre de 2016

Receta: Sopa de pan frito


Sopa de pan frito


Ingredientes

4 raciones
  1. pollo o gallina
  2. garbanzos
  3. jamón o hueso del jamón
  4. zanahorias
  5. agua
  6. sal
  7. huevos cocidos
  8. ajo
  9. perejil
  10. azafran
  11. pan mejor del dia anterior

Pasos

  1. Se pone el agua a hervir, se le añade un bote de garbanzos cocidos, hueso o jamon, pollo o gallina, zanahorias peladas y cortadas a rodajas finitas y un poco de sal (no mucha por el jamón)
  2. Se cuece todo y se desmenuza la carne, se le pone unos ajos cortados, perejil y azafran. Se vuelve a cocer todo unos 5 min
  3. Se pone en el plato el caldo con la carne desmenuzada. Un huevo cocido por persona cortado a cuadritos
  4. Se fríe el pan cortado a cuadritos y se deja en un plato con una servilleta de papel que absorba el aceite
  5. Vas añadiendo el pan al caldo poco a poco. Y a comer calentito que esta rica rica